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viernes, 28 de septiembre de 2012

Días de lluvia :)

Días de lluvia es el título del que será mi primer libro ^^ Por ahora, solo llevo lo que será casi un capítulo, pero algo es algo. Días de lluvia, al menos en principio, va sobre un cambio en la historia de una chica. Algo que le ayude a superar una gran pérdida. Más o menos lo sé, pero no os lo voy a desvelar. Tratará de amor, amistad, algo típico mundo teenager y con thriller también. Intentaré combinarlo todo un poco y a ver que sale jaja Bueno, de todos modos, os dejo lo que es el principio del borrador del primer capítulo. Os pondré más de vez en cuando :) Recordar, vivir siempre con Unas Sonrisas de Más :) Y darme vuestra opinión, por favor!

Aquella noche llovía. Era muy tarde y ella lo sabía, pero le gustaba ver las gotas que iban cayendo poco a poco en su ventana. Oír cómo caen en los charcos que poco a poco se han ido formando en la calzada. Se pasaba así horas, mirando y escuchando el caer de las gotas. A su madre también, y eso es lo único que sabía de ella. Un anochecer, cuando ella tenía tan solo 3 años, su madre salió a la calle a recibir un recado que le acababan de dar por teléfono. Recado que nadie conoce ni ha conocido. Esa fue la última vez que la vieron con vida. Cada vez que llovía, ella se sentaba en el alféizar y dejaba llevar su imaginación hasta un mundo nuevo, un mundo mejor, más bonito, más fácil, más... mágico. Así estaba aquella noche, en la ventana, mirando la lluvia, pensando. Y así se la encontró su padre, que tras 15 años, ya sabía lo que hacía su hija los días de lluvia. La arropó con una manta, la besó en la frente y allí la dejó, dormida, con la cabeza apoyada en el cristal, con una manta de lana que la tapaba prácticamente entera, escuchando las gotas de lluvia caer.
                A la mañana siguiente, el despertador sonó. Ella ya estaba despierta, duchada y vestida, pues los días de lluvia dormía mejor y se levantaba antes. Se había puesto una camiseta básica azul celeste. Una rebeca blanca y unos vaqueros claros. Se puso unas zapatillas blancas y volvió al baño. Se peinó. Su pelo era muy denso, largo, liso, de un color avellana con mechas rubias y muy bonito. Se miró en el espejo. El pelo le caía al lado derecho, tal y como a ella le gustaba. Se agachó y sacó el estuche del maquillaje del armario. Cuando estuvo preparada, se volvió a mirar en el espejo y sonrió. Los días de lluvia estaba de mejor humor. Bajó las escaleras y fue a la cocina. Allí estaba su padre, sentado en la única mesa de la cocina. Era de madera. De un color claro, al igual que las encimeras. Había en cada uno de los lados más largos de la cocina. También había otros muebles, que al igual que los azulejos, eran blancos. El suelo era de imitación de madera, tan clara como la mesa. Lo único que más o menos desentonaba, era el hule, que era azul cielo. En los otros lados de la cocina, no había ningún mueble, pero había puertas, una, daba a la entrada principal de la casa, y la otra a una sala de acceso a la sala de limpieza, el jardín y una habitación.
Buenos días – dijo él cuando la vio entrar en la cocina sonriente.
              

2 comentarios:

  1. Me gusta mucho :) Soy una gran seguidora de tu Blog, sique con ello que se te da muy bien :D

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    1. Muchas Gracias :) Me alegro de que te guste ^^ Y no te preocupes, que por ahora y mientras pueda, quiero seguir con esto.

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