Vistas de página en total

sábado, 29 de septiembre de 2012

Gente que llama a tu puerta...

SÉ SOLIDARIO. Si estás leyendo esto, es porque tienes suficiente. Pasamos por tiempos difíciles, pero tú no estás muy mal. Si que es cierto que todos hemos tenido que reducir gastos, pero eso tampoco nos ha quitado de tanto, al fin y al cabo, aunque sea tan solo por ahora, vivimos bien. Pero no todos tienen esta suerte. Porque aunque no queramos verlo, ellos están ahí. Pasamos a su lado varias veces al día y evitamos mirarles, hacemos como que no hemos visto nada. No nos justificamos, no hace falta, porque como no hemos visto nada... Hacemos que no existen, ¿y todo por qué? Porque es duro saber que hay gente así, es muy triste saber que mientras nosotros estamos comiendo hasta llenarnos, hay gente en la calle sin nada que llevarse a la boca y sobretodo, porque nos hace sentir culpables y nos crea remordimientos de conciencia. El mero hecho de saber que podíamos haber evitado que esta gente estuviese así y que no lo hayamos hecho, nos reconcome. Pero yo os pido una cosa. Sed solidarios. No podemos hacer nada para que toda esta gente viva igual que nosotros, pero podemos ayudarles a que al menos por un día, tengan algo que comer. Pasamos por tiempos difíciles y cada vez hay más gente en la calle, gente que no tiene nada. Ni para comer. Que mientras tú estás twitteando con tu nuevo smartphone de última generación, con tu supertarifa, en una tumbona en un hotel de la playa, ellos están en la calle, llamando a cada puerta para poder conseguir algo que llevarse a la boca. Y ¿qué hacemos nosotros? Hay quien no les abre siquiera, hay quien les menosprecia, pero yo os pido que les deis algo, lo que sea. Ellos estarán agradecidos hasta de un pico de pan de hace tres días, porque son tan humildes que no tienen ni eso. ¿Qué os cuesta darles un litro de leche, un paquete de galletas, una lata de atún o cualquier otra cosa? Vosotros tenéis de sobra, ayudadles un poco a ellos, sed solidarios. Porque nosotros tenemos en parte la culpa de que ellos estén así y también, porque en estos tiempos, no sabes si serás tú el que mañana tenga que ir pidiendo comida a cada puerta. Hacedme caso, por favor, os sentiréis mejor incluso, si no lo hacéis por ellos, hacedlo por vosotros, por lo bien que se siente después de haber hecho algo de este tipo, después de haber hecho una buena acción. Por favor, dadles algo. Porque estas cosas pasan, y no os cuestan nada.
Sin ir más lejos, hace un rato, estábamos solos mi hermana y yo en casa y han llamado a mi puerta. Ha abierto mi hermana. Si no hubiese estado yendo hasta el salón, no me habría dado cuenta de que era una mujer la que hablaba y que pedía comida y mi hermana le cerraba la puerta. Rápidamente, he ido a la despensa y he cogido un brick de leche. Estaba el mueble lleno. ¿Qué me costaba darle uno? Por suerte, la mujer no estaba muy lejos y le he dado ese brick y un paquete de galletas que tenía. Estas cosas pasan. Y a mí no me ha costado nada dárselo. Tengo 20 bricks más de leche y 5 paquetes de galletas, ¿qué me ha costado darle esto? Y aun así, me siento mal por lo que casi se queda sin nada  y más aún, porque siento que he hecho poco, que podría haber hecho mucho más. Pero aun así, por otro lado, me he sentido más lleno por dentro, por sentir que gracias a mí, esta mujer y su posible familia, va a tener algo que llevarse a la boca. Y también, para ayudarla a ella y a todo el resto de la gente humilde del mundo, he venido corriendo a hacer esto, para que vosotros hagáis como yo y les deis algo. NO dinero, sino algo de comer, que es lo que realmente necesitan.
Ayuda a la gente que no tiene, por favor. Con ello, conseguirás muchas, muchísimas sonrisas. Porque por muy mal que estén, puedes sacarles Unas Sonrisas de Más :)

No hay comentarios:

Publicar un comentario